Hace poco más de dos semanas decidí embarcarme en lo que hasta el momento consideraría el reto más difícil de mi vida, hacer la cura depurativa del sirope de Arce.
Lo que no sabía es que al terminarla me encontraría con un reto mucho mayor…
¿En qué consiste esta cura?
Se trata de no comer (ayunar) durante 7 días, beber agua o infusiones y tomarte una mezcla del sirope de arce con zumo de limón y un poco de cayena. (Para mi gusto asqueroso)
Jamás había oído hablar de ésto hasta que mi hermano me comentó que lo había hecho y aunque se le había hecho duro estaba muy contento con los beneficios.
¿Qué es lo que se consigue con ella?
Con esta cura ayudamos a nuestro cuerpo a eliminar toxinas, depósitos grasos y líquidos retenidos. En definitiva, hacemos una depuración de nuestro organismo.
Estaba asustada de empezarla (si la empezaba la acabaría) y me parecía una locura eso de no comer, ya que a mí me encanta y disfruto mucho con ello.
Fui preguntando a gente si sabía de alguien que la hubiera hecho, etc. y me sorprendió la cantidad de gente que encontré que tenía conocidos que estaban muy satisfechos de haberla hecho e incluso gente que también la había hecho.
Todas las críticas fueron buenas. ¡me cachis! (no hay escusas para no hacerla…)
Me mentalicé y aprovechando que estaba de vacaciones y de que me había pegado la mala vida comiendo hasta empacharme cuando fui a Talavera a ver ami amiga Ana pensé que era el mejor momento de hacerla.
¡Patri! ¡Ahora o nunca!
Sólo necesitaba ser fuerte mentalmente para superarlo como la vez que superé el reto de las olivas y las cervezas con alcohol.
Fui anotando mis sensaciones cada día:
1. Me duele la cabeza, tengo hambre y el sirope ¡¡pica!!! (me había pasado con la cayena) buaj!
2. Me duele más la cabeza y tengo muchísima hambre. ¡S.O.S!
3. Tengo un agujero negro en el estómago que parece que me vaya a absorber entera. ¡¡quiero comeeeeeerrr!!
4. Me siento genial, no me duele nada y no tengo hambre, ojalá todos los días fueran así.
5. Estoy floja, incluso algo mareada. Tengo hambre psicólogica, pero no es mi cuerpo realmente el que me pide comer.
6. Angustia, ganas de comer por el simple hecho de llevarme algo sólido a la boca y fuerte dolor de cabeza que atribuyo a otros motivos que no es la cura.
7. Pasar andando por una tienda de pollos asados me despierta el hambre por unos momentos a más no poder. jajaja. Menos mal que se me pasó al ratito.
¡¡Acabé la cura!!! ya puedo comeeeer!!! yujúúúúúúúuú´!!!!
Satisfacción plena de éxito, no hay nada que me proponga de lo que no sea capaz. 😀
Fue el día seis de la cura, ya con el organismo prácticamente depurado cuando la empresa en la que trabajaba, Passatge me despedía, fijándose con esta noticia mi mayor reto.
No creo en las casualidades, ésto sería el remate de la cura.
No sólo se iba a depurar mi organismo si no también ahora mi mente, la cura no podía ser más completa.
Cuando mi hermano me dijo que cuando acabase la cura mi organismo estaría como si hubiera vuelto a nacer no podía estar más en lo cierto.
He vuelto a nacer, empiezo de cero, una nueva etapa en mi vida dónde no sé lo que el futuro me deparará.
Lo que sí sé es que el triatlón me ha enseñado como deporte de adaptación a adaptarme a las situaciones haciéndome más fuerte para lo que pueda venir.
Ésto sí que va a ser un verdadero reto.
Be happy 😉
Qué fueertee Patito!!! Siento tristeza y alegría juntas al oirte. Me ha encantado lo de la depuración… Yo duré 3 días y por supuesto cuando no tenía hijos. La depuración del cuerpo es muy importante y hay otras cosas que puedes hacer para dejarte el intestino limpio!!! Jajaja bueno un día quedamos y te lo cuento. Tú naces y renaces… Ave Fénix y ahora km0. Te deseo lo mejor de lo mejor. Qué raro Passatge sin ti….. Un besazo Patri.
Cuando perdemos algo es porque el Universo quiere que dejemos sitio para que llegue algo nuevo y mejor. Con esa determinacion y esa fuerza de voluntad que tienes seguro que estos cambios importantes que está habiendo en tu vida son todos para mejor.
Que crak tia, 7 dias sin comer!! Eres mi idola ;p